
El lobo
aúlla
su grito
feroz a la luna,
su frio aliento
deleita su mente
y
su profundo respirar
estremece al viento,
afila las garras
y
se pone a raspar un cigarrillo,
con desesperación
un cetil cae de su bolsillo,
baja las patas,
lo coge del suelo caliente
y
vuelve a guardarlo en su bolsillo
para el día siguiente,
sigue
concentrado
mirando
los ojos rojos del cielo
que lo envuelve de ternura,
mientras va fumando,
mientras va pensando,
crea
un
pacto
con la luna,
crea una ley,
está dispuesto a cumplir,
pero la luna queda dudando,
ella impone su ley
y
el lobo queda dudando,
la duda los corroe,
pero llegan a un acuerdo,
mientras
la luna endiablada
acepta
su derrota,
el lobo fortalecido por su victoria
va terminando
de destruir el cigarrillo
que no prendió,
mientras caen colillas del cielo,
la luna
se adelantó,
empezó a fumar desconcertante,
su
corazón
latía
y
las hojas caían,
el viento seguía soplando,
y
el lobo
veía como ella se ahogaba
mientras su agonizante pulmón estaba deshecho,
estaba en penumbras,
el lobo aulló nuevamente hacia el viento..
calma,
calma la noche
y la luna sigue sin control
inundando el mundo con colillas de desesperación..
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